La Epístola
Isidro Fabela # 999
Col. Tres Caminos
CP 50010 Toluca, Edo. Mex.
#137 Enero, 2006
Impreso en México
Calendario
Enero 20 y 21, León, San Juan Bosco: viernes y sábado, la iglesia hospedará la próxima reunión de predicadores.
Febrero 3 al 5, Aguascalientes, San Marcos, Evangelismo Extranjero, Guillermo Kincaid y Marco Chaires.
Febrero 16 al 19, 2006, León: jueves a domingo, conferencia de exhortación, con Marco Chaires y Guillermo Kincaid.
Marzo 8 al 12, 2006, Aguascalientes, Mitla: miércoles a domingo, conferencia de evangelismo extranjero, con Ramiro García y Guillermo Kincaid.
Noticias
La Reunión de Predicadores
se llevará a cabo los días 20 y 21 de enero, 2006, en León, Gto. El salón está en Tarragona 207, Col. Vista Hermosa.Números de apoyo (lada 477):
Elías Barba 777-0108
Sergio Arias 777-5981, o cel. (044 477) 563-0092
Alejandro Alatorre 762-6710
Orario de actividades
día 20 7:00 p.m. Mensaje de Miguel N. Jackson
9:00 p.m. Cena
día 21 9:00 a.m. Desayuno
9:50 a.m. Mensaje de Ramiro García
11:00 a.m. Mensaje de Isaac Girón
12:00 Informe de Iglesias, oración
Reunión Libre
3:00 p.m. Comida
5:30 p.m. Mensaje de Noé G. Castillo
Contabilidad
Epístola: Esto no incluye los gastos que tienen los distribuidores en las iglesias. Aquí solamente cuentan gastos míos en Toluca, y las ofrendas dadas directamente a mí:
Saldo inicial (Enero 1, 2005): 2762.50
Gastos de envío: -2699.20
Papel -193.80
Costo de Dominio Internet -328.00
Ofrendas: +500.00
Saldo final (Diciembre 31, 2005) 41.50
El Misterio de Dios II
2 Para que sean confortados sus corazones, unidos en amor, y en todas riquezas de cumplido entendimiento para conocer el misterio de Dios, y del Padre, y de Cristo;
3 En el cual están escondidos todos los tesoros de sabiduría y conocimiento.
Colosenses 2
Aunque hay quienes niegan el misterio de Dios, y se han valido de "nuevos descubrimientos," antiguos manuscritos antes desconocidos, la nueva "ciencia" de crítica textual, y nuevos preceptos de traducción, para borrar de la Biblia todo rasgo del misterio del Padre y de Cristo, francamente han fracasado. Muchos textos directos han perdido su fuerza por la duplicidad de las Biblias modernas, seguramente, pero la doctrina original de los apóstoles se ve en muchas evidencias indirectas en todas las Biblias.
La Venida de Jehová
Por ejemplo, los autores del NT muchas veces citan el cumplimiento de alguna profecía, señal o símbolo del AT en que originalmente se aplica a Jehová, pero se cumple por Jesucristo. Compara las profecías de Juan Bautista:
2 Como está escrito en Isaías el profeta: He aquí yo envío á mi mensajero delante de tu faz, que apareje tu camino delante de ti.
3 Voz del que clama en el desierto: Aparejad el camino del Señor; enderezad sus veredas.
Marcos 1
Esto viene de dos profecías, en Malaquías (3.1) e Isaías (40.3), (aquí Marcos no más menciona el mayor de los dos, por lo cual algunos hermanos acusan a la Valera 1909 de un error, por lo cual repetimos cansadamente que no les consta) donde ambos mencionan a Jehová como el que viene, pero se cumple en Juan Bautista que aparejó camino a Jesús. No dice directamente que Jesús es Jehová venido en carne, pero si no es así, ¿cómo es posible que los apóstoles permitan una confusión así? O también, cuando el salmista habla de Dios Creador (Sal. 102:25-27) "Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra," el apóstol lo inserte entre muchos textos hablando acerca del "Hijo" (Heb. 1:10-12). Una vez más, no dice directamente la doctrina, pero es difícil pasar por alto la opinión del apóstol. El tiempo y el espacio me impide detallar todos los casos, como cuando Isaías dice que Jehová es llamado "piedra para tropezar," y "tropezadero para caer" (8:14) mientras Pedro lo cita acerca de Jesús, "Piedra de tropiezo, y roca de escándalo" (1 Pe. 2.8). Isaías también dice que a Jehová "se doblará toda rodilla, jurará toda lengua" (45.23) y Pablo dice que eso se hará en el nombre del Señor Jesús (Fil. 2.10). Si no es una prueba definitiva, es otra evidencia que el apóstol confunde a Jehová y Jesús. David dijo de Jehová, "Subiste á lo alto, cautivaste la cautividad" (Sal. 68.18) pero Pablo dijo que Jesús hizo eso (Efe. 4.8). Jeremías dijo que aquel "hijo de David" será llamado "Jehová justicia nuestra" (23:5) y Pablo, que obviamente no se inquieta para evitar confusión, dice que en efecto Jesús es nuestra justicia (2 Cor. 5.21). Jehová es el "que escudriña el corazón, que prueba los riñones, para dar a cada uno según su camino" en palabras de Jeremías (17:10), pero Jesús dice, "escudriño los riñones y los corazones: y daré á cada uno de vosotros según sus obras" (Ap. 2.23). Isaías dice que Jehová vendrá y "su salario viene con el" (Isa. 40.10), palabras que Juan oyó de la boca de Jesús hablando de sí mismo, "yo vengo presto, y mi galardón conmigo" (Ap. 22.12). Jehová dice que fue "apreciado" al "hermoso precio" de treinta piezas de plata (Zac. 11.13), curiosamente el mismo precio a que Jesús fue apreciado (Mat. 27.9). El Ariano moderno puede tener explicaciones para todas estas curiosidades, pero el sincero no puede evitar reconocer la complicación inevitable por ellas. El que no tiene prejuicio concluye que Jesús es el cumplimiento de la prometida "venida" de Jehová.
El Señor
Si el presidente Fox visita al presidente Bush, y los reporteros reportan sobre su conversación sin especificar cual presidente estaba hablando en cada instante, sería una noticia muy confundida. "El presidente le dijo, ‘tenemos un problema en la frontera,’ y el presidente respondió, ‘no es para tanto.’ Luego el presidente se sentó mientras el presidente salió molesto." Ves que no es posible acertar quién dijo cual. Usar solamente el título cuando hay más de uno presente es confusión. Pero, en el Nuevo Testamento la palabra "Señor" a solas refiere muchas veces a Dios Padre, y muchas veces a Jesucristo, pero es curioso que los apóstoles nunca intentan evitar una confusión. A veces el contexto aclara a quién se refiere el título, pero a veces ambos se encuentran en el contexto, o ninguno, resultando en un texto "ambiguo," difícil de acertar de quién se habla.
[La versión Nuevo Mundo reemplaza muchos de estos textos con el nombre "Jehová," aunque en Griego es siempre "Señor." Utiliza la traducción Peshitta (Siriaca, muy semejante a Hebreo) como autoridad para los cambios, aunque la Peshitta es solamente una traducción también. Y aun si tal cambio es digno de considerar en el caso que el original posiblemente fue escrito en Hebreo (Mateo), es inexcusable en todos los casos que el original fue escrito en Griego, como todo lo demás del NT. Si los autores originales escribieron "Kyrios" (Señor), el Testigo de Jehová no tiene derecho ni fundamento para rendirlo "Jehová," aún si algunos lo vertieron así al Siriaco en el tercer siglo. Es un pretexto para fraude.]
Como sea, el uso de "Señor" para referir a Dios y a Cristo simultáneamente es evidencia, que los miopes no ven aunque si fuera cascabel les hubiera mordido. La ausencia de cuidado en especificar de quién se habla es muy extraño si en realidad son diferentes personas. Pero si no importa su distinción, como creemos nosotros, es otra cosa. Sería útil averiguar si es verdad. Se me hace que si omitimos el contexto extendido ninguno podrá asegurar de cual habla en muchos casos. Si verdaderamente hay una diferencia absoluta entre el Padre y el Hijo en la opinión de los apóstoles, no debe ser difícil acertar de quién se habla en cada uno de estos casos, con solo el contexto inmediato. Pero si no es posible distinguir de quién se habla sin la definición, es evidencia que los apóstoles no creían muy importante evitar la confusión cuando hablaban genéricamente del "Señor." Así que, al TJ le daré un sencillo examen. En las siguientes frases escribe al margen de quién se habla, "D" por Dios o "C" por Cristo. No busques ningún texto hasta completar el examen. Cada error, y cada caso imposible de definir aun con el contexto es evidencia de la divinidad de Cristo. Las respuestas estarán al final con el contexto que lo define.
1. ... éste es el Señor de todos. Hec. 10:36
2. En el cuidado no perezosos; ardientes en espíritu; sirviendo al Señor; Rom. 12:11
3. Que si vivimos, para el Señor vivimos ... Rom. 14:9
4. ... al Señor de gloria 1 Cor. 2:8
5. Ministros por los cuales habéis creído, y eso según que á cada uno ha concedido el Señor. 1 Cor. 3:5
6. ... iré presto á vosotros, si el Señor quisiere; 1 Cor. 4:19
7. ... el que se junta con el Señor, un espíritu es 1 Cor. 6:17
8. Porque el que ... es llamado siendo siervo, liberto es del Señor: 1 Cor. 7:22
9. No podéis beber la copa del Señor, y la copa de los demonios: 1 Cor. 10:21
10. ... bebiere esta copa del Señor indignamente 1 Cor. 11:27
11. Mas siendo juzgados, somos castigados del Señor 1 Cor. 11:32
12. ... hay repartimiento de ministerios; mas el mismo Señor es. 1 Cor. 12:5
13. ... creciendo en la obra del Señor siempre, 1 Cor. 15:57
14. ... se convirtieren al Señor, el velo se quitará. 2 Cor. 3:16
15. ... mirando como en un espejo la gloria del Señor, 2 Cor. 3:18
16. ... que es administrada de nosotros para gloria del mismo Señor 2 Cor. 8:19
17. Mas el que se gloría, gloríese en el Señor. 2 Cor. 10:17
18. ... todo lo que hagáis, hacedlo de ánimo, como al Señor, Col. 3:23
19. ... del Señor recibiréis la compensación de la herencia: Col. 3:24
20. ... nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, 1 Tes. 4:15
Respuestas ( "A" significa "ambiguo," o sea, yo no puedo discernir por el contexto de cual está hablando.):
1. Hec. 10:36 C 2. Rom. 12:3,5 A 3. Rom. 14:9 C 4. 1 Cor. 2:8 C 5. 1 Cor. 3:6 D 6. 1 Cor. 4:17,20 A 7. 1 Cor. 6:15 C 8. 1 Cor. 7:22 C 9. 1 Cor 10:20 D 10. 1 Cor. 11:27 C 11. Heb. 12.5,7 D 12. 1 Cor. 12:3 C 13. 1 Cor. 15:57 C 14. 2 Cor. 3 A 15. 2 Cor. 3:18 A 16. 2 Cor. 8:23 C 17. 1 Cor. 1:31 D 18. Col. 3:24 C 19. Col. 3:24 C 20. 1 Tes. 4:14 D |
Es muy interesante que hay tantos casos ambiguos, también que la misma frase se usa para ambos en diferentes contextos (9 y 10), y es interesante que el contexto inmediato a veces indica uno cuando otro contexto paralelo afirma el otro (11), pero lo que mas me sorprende es que aunque yo formé el examen, al repasarlo, yo no puedo recordar todas las respuestas. A propósito, no te culpes demasiado, que casi todos se equivocan en el último (20).
4 Un cuerpo, y un Espíritu; como sois también llamados á una misma esperanza de vuestra vocación:
5 Un Señor [!!??], una fe, un bautismo,
6 Un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todas las cosas, y por todas las cosas, y en todos vosotros.
Efesios 4
Dios Padre
Referir a Dios como "Padre nuestro" tiene sentido si tan solo para recordarnos de su actitud para con nosotros, algo que por nuestra inclinación al pecado solemos dudar. Pero referir a Dios como "el Padre de Jesucristo" es un poco extraño. Si yo introduzco alguien como "el padre de fulano," es para identificarlo, o distinguirlo de otros. Pero hay un solo Dios, y no tiene que ser distinguido de nadie, así que, llamarle "el Padre de Jesucristo" no me suena. Sería lógico si hubieran otros semejantes a Dios, padres de otros. Pero no habiendo ningunos mas, "Padre de Jesucristo" tan solo lo distingue del mismo Jesucristo. Pero ¿es para tanto? ¿Quién puede confundirlos para requerir esa distinción?
Lo mismo se ve en referir a Dios formalmente como "Dios Padre," o "Dios el Padre," sin referir al padre de alguien ("nuestro Padre," o "Padre de todos"). Obviamente no lo dice así para distinguirle de algún otro dios, digamos, Dios Madre. Seguramente es para describir algún aspecto de él, o distinguirle de otro aspecto, como "Dios el Rey" o "Dios el Juez." Un padre puede ser maestro en la escuela donde asiste su hijo, y en la clase no puede actuar como padre de él. Tiene que tratarle exactamente como otro estudiante. Dirá a su hijo en tal caso, que en la escuela es su maestro, y en casa es su padre. De la misma manera "Dios Padre" describe un "aspecto" de Dios, lo cual aclara que tiene otros aspectos que no sean de "Padre." Esto es especialmente claro cuando te das cuenta que Dios nunca es llamado "Dios Padre" a menos que Jesucristo es también mencionado junto.
Gál. 1:1 P
Gál. 1:3 Gracia sea á vosotros, y paz de Dios el Padre, y de nuestro Señor Jesucristo,
Efe. 6:23 Paz sea á los hermanos y amor con fe, de Dios Padre y del Señor Jesucristo.
Fil. 2:11 Y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, á la gloria de Dios Padre.
Col. 3:17 ... hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias á Dios Padre por él.
1 Tes. 1:1 ... á la iglesia de los Tesalonicenses que es en Dios Padre y en el Señor Jesucristo:
Tito 1:4 Gracia, misericordia, y paz de Dios Padre, y del Señor Jesucristo Salvador nuestro.
1 Pe. 1:2 Elegidos según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo:
2 Pe. 1:17 Porque él había recibido de Dios Padre honra y gloria,
2 Juan 3 Sea con vosotros gracia, misericordia, y paz de Dios Padre, y del Señor Jesucristo, Hijo del Padre,
Judas 1 ... á los llamados, santificados en Dios Padre, y conservados en Jesucristo:
Puedes ver que en cada caso que los apóstoles usan el título formal "Dios Padre," es porque Jesús se menciona también. Lo cual es evidencia que "Dios Padre" le distingue de otro aspecto de Dios, y en este caso, el otro aspecto es Hijo. Si la distinción entre ellos hubiera sido tal como entre Dios y ángeles, no sería necesario. Se pudiera no mas mencionar a Dios y a Jesús también, porque ¿quién va a confundirlos? Pero cuando hablan de ellos juntos, sienten la necesidad de distinguirlos, y por eso llaman a Dios "Dios Padre." Es por eso quizá que Dios casi no es referido como "padre" en el AT. De hecho, la rarísima "paternidad" de Dios en el AT es tres veces una metáfora (Dios es "como" un padre, Sal. 103.13, Pro. 3.12, Mal. 1.6) y las cuatro veces que Dios es llamado directamente "Padre" (Sal. 89.26, Isa. 9.6, Isa. 63.16, 64.8), en una Dios es padre de David (Jesús profetizado), y en otra Jesús es profetizado como el Padre (Isa. 9.6).
El Hijo
La conclusión que los apóstoles sienten la necesidad de distinguir entre Padre e Hijo como "aspectos" de la misma persona es aun más claro cuando consideramos las veces que se usan juntos los calificativos sencillos "el Hijo" y "el Padre." Sabiendo que "Padre" es una descripción de Dios (no un nombre), es muy curioso cuando se usa en contra-distinción con "el Hijo." Si "el Padre" es un título usado por costumbre, llamarse "el Hijo" en el mismo contexto sería muy atrevido para un ser creado. No dice "su hijo" sino "el Hijo." Y si "Padre" habla de su carácter revelado, distinguiéndole de otro aspecto suyo, hablar de si mismo como el "Hijo" en el mismo contexto es equivalerse a un aspecto de Dios. De cualquier forma, barajar "Padre" e "Hijo" en el mismo contexto obviamente describe una relación en la cual ambos son de la misma categoría.
Mar. 13:32 Empero de aquel día y de la hora, nadie sabe; ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo, sino el Padre.
Juan 3:35 El Padre ama al Hijo, y todas las cosas dió en su mano.
Juan 5:20 Porque el Padre ama al Hijo, y le muestra todas las cosas que él hace;
Juan 5:21 Porque como el Padre levanta los muertos, y les da vida, así también el Hijo á los que quiere da vida.
Juan 5:22 Porque el Padre á nadie juzga, mas todo el juicio dió al Hijo;
Juan 5:26 Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así dió también al Hijo que tuviese vida en sí mismo:
Juan 14:13 Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, esto haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.
1 Jn. 2:24 ... si fuere permaneciente en vosotros, también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre.
1 Jn. 4:14 Y nosotros hemos visto y testificamos que el Padre ha enviado al Hijo para ser Salvador del mundo.
2 Juan3 ... gracia, misericordia, y paz de Dios Padre, y del Señor Jesucristo, Hijo del Padre,
Notaste sin duda que los títulos se usan en contra-distinción uno al otro. Obviamente es una comparación. El TJ alega confiadamente que un Padre y un Hijo tienen que ser diferentes personas, y padre por definición es mayor que hijo. Pero esto solamente demuestra la mente superficial de quienes rehúsan considerar la existencia de misterios. En primer lugar, aunque Padre es intrínsecamente mayor que Hijo, obviamente tienen la misma naturaleza. Uno no es mayor al otro en esencia, constitución o calidad. Un hijo por definición es un ser igual en todo sentido menos su correlación, pues es una "copia" del original. Aun si son diferentes personas no son diferentes en esencia (he ahí la conclusión de trinitarios y el credo Niceno). Pero, por si no lo han considerado, "padre" e "hijo" no tienen que hablar de diferentes personas. Yo soy padre y yo soy hijo y yo soy una sola persona. Pueden describir diferentes "aspectos" de la misma persona.
Otra cosa obvia es que Jesús y los apóstoles nunca usaron el título "hijo de Dios" metafóricamente, para indicar por ejemplo su dependencia de Dios, mucho menos para asegurar su inferioridad intrínseca a Dios, sino lo usaron literalmente, para indicar su especial y verdadera relación a Dios, o sea, su "igualdad." Así lo entendieron los Judíos también:
18 Entonces, por tanto, más procuraban los Judíos matarle, porque no sólo quebrantaba el sábado, sino que también á su Padre llamaba Dios, haciéndose igual á Dios.
Juan 5
Decir que "el Hijo" es menor al "Padre" es en efecto decir que lo es en posición, no en naturaleza. Es subordinado, no inferior. Si es literalmente hijo de Dios (si verdaderamente nació de una virgen concebido por el Espíritu Santo), en todo aspecto esencial es igual a su padre. Esta es una buena oportunidad para el Ariano practicar su comprensión de una paradoja, que uno puede ser menor e igual a la misma vez.
Mutualidad
A veces el Padre y el Hijo se describen sosteniendo la misma relación uno al otro. O sea, hay aspectos de su relación en que lo que uno es al otro, estotro es también lo mismo al uno. Existen aspectos en que son interdependientes, algo muy curioso del punto de vista ariano.
Mat.11:27 ... y nadie conoció al Hijo, sino el Padre; ni al Padre conoció alguno, sino el Hijo, y aquel á quien el Hijo lo quisiere revelar.
Luc.10:22 ... y nadie sabe quién sea el Hijo sino el Padre; ni quién sea el Padre, sino el Hijo, y á quien el Hijo lo quisiere revelar.
Juan 10:38 ... para que conozcáis y creáis que el Padre está en mí, y yo en el Padre.
Juan 14:10 ¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí?
Juan 14:11 Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí:
¿Nadie conoce al Hijo sino el Padre? ¿Nadie sabe quién sea el Padre sino el Hijo? Sin considerar la interdependencia estas son declaraciones extraordinarias. Obviamente habla de la elección, que requiere revelación al humano para que conozca y crea (Mat. 11.25). Pero fíjate que de la manera que el Hijo conoce al Padre, el Padre conoce al Hijo igualmente. No hay diferencia descrita sino la voluntad del Hijo. Esto no suena como la relación entre el Creador y un ser creado.
Ahora, el concepto que Dios estaba "en Cristo" no presenta mas problema que el de ser "lleno del Espíritu Santo." Pero es mas, porque como dice nuestro texto principal, Dios habitaba en Cristo. Pero todavía es mas, dice también que Cristo estaba "en el Padre." Es la misma preposición, en el mismo contexto, entonces obviamente habla de la misma cosa. Así que, Cristo habitaba en Dios. Habitan en el mismo cuerpo, ocupan el mismo espacio, piensan los mismos pensamientos, son inseparables, son indistinguibles. Es un misterio.
Arianos sencillamente lo niegan, y lo traducen "en unión con," como que solamente habla de estar conectados, en constante comunión, lo cual supongo que pueden suponer legítimamente, si solo consideramos las "reglas" de traducción. Pero sin duda esto es muy extraño, aun para ellos. No es difícil el concepto que dos personas distintas estén bien comunicados, y no requiere tales milagros que menciona Cristo para demostrarlo. Además, esta forzada y desesperada traducción produce otra frase chistosa en la versión chistosa. Pues si Cristo está "en unión con" el Padre, es por demás decir que el Padre está en unión con Cristo también. Es como decir Aguascalientes tiene frontera común con Zacatecas, y además, Zacatecas tiene frontera común con Aguascalientes. Simón. La mutualidad es la complicación. Cristo es muy atrevido en aun decir que Dios está en unión con él. Puedes pegar un póster a la pared pero no tiene sentido decir que pegaste la pared al poster. Cristo obviamente está hablando de una "unión" mutua. Y no puedo imaginar ninguna otra unión mutua que tiene sentido. ¿Qué sería, que fueran gemelos siameses?
Bueno, TJs suelen recordarnos que Jesús pidió de Dios que los creyentes seamos "uno" como ellos son uno (Juan 17:11), por lo cual suponen que ellos no son "uno" en esencia, sino en opinión o propósito, o sea, están de acuerdo. Y es una legítima interpretación metafórica de la frase "ser uno." Pero Cristo es mucho mas "en unión con" el Padre que nosotros somos unos a otros. Somos uno en un sentido, como ellos son uno, pero ellos obviamente son uno en otros sentidos también. Y mas al punto, estar de acuerdo no es lo mismo que estar "en otro" o mutuamente "en unión con" el otro. Y recuerda que Cristo lo afirma como un concepto difícil de creer, precisamente explicando la correlación del Padre y el Hijo. Unión de propósito sencillamente no es el concepto de que se trata.
Otra posible alegación de los Arianos es la relación que tenemos con Cristo, que a veces dice que Cristo está en nosotros, y a veces que estamos en Cristo. Esto no explica nada, por supuesto, pues como dije, los Testigos de Jehová no tienen explicaciones, solamente respuestas practicadas. La relación que tenemos con Cristo es un misterio también, obviamente, pero aunque usa la misma frase, nuestra no es la misma correlación mutua que tienen ellos. "En" es una preposición muy versátil, puede tener muchos significados. Cristo vive "en" nosotros literalmente por medio del Espíritu Santo, que nace en el corazón del creyente, siendo uno de los misterios. Pero nosotros estamos "en Cristo" por representación, o sea, somos "hallados en él" legalmente (Fil. 3.9), "bautizados en él" simbólicamente (Rom. 6.3), vestidos de él prácticamente (Gal. 3.27), creados en él para buenas obras (Efe. 2.10). Es obvio que la semejanza de esas frases disfraza una diferencia gramática, y por eso nunca se dicen en el mismo contexto. Pero en el otro caso, la frase es recíproca intencionalmente, usando la misma preposición en el mismo contexto, con el propósito de revelar un concepto difícil de creer, la correlación del Padre y el Hijo.
Los Arianos no son los únicos que resisten estos versículos y el misterio que descubren. Trinitarios insisten que por esto tienen que ser diferentes personas, una lógica que francamente ignoro. John Gill, Puritano cuya opinión respeto mucho, dice que son
"frases que expresan la equivalencia de naturaleza en el Padre y el Hijo; de la perfecta igualdad del Hijo con el Padre, siendo que el Hijo está igualmente en el Padre, como el Padre está en el Hijo; y además de la distinción personal que hay entre ellos; porque nada propiamente puede decirse estar en si mismo. El Padre ha de ser distinto que el Hijo que está en él, y el Hijo ha de ser distinto del Padre, en quién está; el Padre y el Hijo, aunque de una sola naturaleza, no puede ser una sola persona"
(Gill, Comentario, Juan 14:10).
De mi punto de vista esto indica no que son dos personas distintas, sino dos manifestaciones de la misma persona. Pero admito que es un misterio.
Simultaneidad
Otra indicación del misterio es la simultanea habitación de ambos en el cristiano:
Rom. 8:9 Mas vosotros no estáis en la carne, sino en el espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, el tal no es de él.
Efe. 2:22 En el cual vosotros también sois juntamente edificados, para morada de Dios en Espíritu.
Efe. 3:17 Que habite Cristo por la fe en vuestros corazones;.
Juan 14:23 Respondió Jesús, y díjole: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos á él, y haremos con él morada.
2 Juan 9 Cualquiera que se rebela, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene á Dios: el que persevera en la doctrina de Cristo, el tal tiene al Padre y al Hijo.
Esto no es decir que dos personas viven en nosotros en espíritu, porque es "un mismo Espíritu" que está en nosotros (1 Cor. 12.4,8,9,11,13). Nunca habla de "los espíritus" que están en nosotros. Esto no es extraño, pues muchas veces mencionan a los dos haciendo la misma cosa, o siendo la misma fuente.
Rom. 1:7 Gracia y paz tengáis de Dios nuestro Padre, y del Señor Jesucristo.
2 Juan 3 Sea con vosotros gracia, misericordia, y paz de Dios Padre, y del Señor Jesucristo, Hijo del Padre, en verdad y en amor.
Para el Ariano moderno esto no mas significa que dos personas están trabajando juntos, aunque de mi punto de vista es muy curioso que siempre mencionan a Jesús trabajando con Dios para darnos "gracia." Se supone que gracia viene exclusivamente de Dios. Pero hay ocasiones en que los apóstoles, seguramente sin calcular, aclaran que no piensan de ellos como dos trabajando juntos, sino de una sola persona. Fíjate que cuando mencionan a los dos haciendo lo mismo y usan un verbo, el verbo es singular.
1 Tes. 3:11 Mas el mismo Dios y Padre nuestro, y el Señor nuestro Jesucristo, encamine nuestro viaje á vosotros.
2 Tes. 2:16 Y el mismo Señor nuestro Jesucristo, y Dios y Padre nuestro, el cual nos amó, y nos dió consolación eterna, y buena esperanza por gracia, 17 Consuele vuestros corazones, y os confirme en toda buena palabra y obra.
La versión Nuevo Mundo cambia estos verbos a plurales sin decirnos en la margen su autoridad para hacerlo, pero todos los textos griegos que tengo disponibles tienen los verbos exactamente iguales, singulares. Aunque dos se mencionan, la persona es una.
Transposiciones
Ahora, aunque podemos multiplicar estas indicaciones, voy a terminar con algo que los apóstoles hacen, aparentemente sin intención. Podemos llamarlo transposición, pero el Ariano tiene que llamarlo confusión. Sucede tan a menudo que no se sugieren explicaciones razonables, ni para Arianos modernos. No tienen explicaciones, ni siquiera irrazonables, pues leen la Biblia tan escasamente que probablemente nunca se han fijado en la mayoría de estos. Entonces fíjate tu, hablando el apóstol acerca de Dios, sin cambiar tema, y a veces sin ni siquiera empezar otro enunciado, cambia el sujeto a Cristo, o al revés. Es obvio que los autores intentan distinguir las operaciones de Cristo y Dios muchas veces, pero es también obvio que no lo hacen siempre. Esto es un fenómeno común, especialmente en Pablo y Juan. Tal vez es subconsciente (revelaron el misterio, no necesariamente lo entendieron), pero considerando lo siguiente, a mi me es claro que no piensan de ellos como diferentes personas. Considera con calma cada uno de estos ejemplos porque sin excepción exponen el misterio sin tratar con la doctrina directamente, y probablemente sin reconocimiento. Manifiestan la noción apostólica acerca de la persona de Jesucristo. Al considerarlo honestamente, no veo como un sincero puede negar el misterio. Si estas escrituras no convencen, francamente no tengo interés en seguir intentando.
Rom. 8:9 Mas vosotros no estáis en la carne, sino en el espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, el tal no es de él.
Rom.14:10 ... porque todos hemos de estar ante el tribunal de Cristo. 11 Porque escrito está: Vivo yo, dice el Señor, que á mí se doblará toda rodilla, y toda lengua confesará á Dios. 12 De manera que, cada uno de nosotros dará á Dios razón de sí.
1 Cor. 7:17 Empero cada uno como el Señor le repartió, y como Dios llamó á cada uno, así ande: y así enseño en todas las iglesias... 22 Porque el que en el Señor es llamado siendo siervo, liberto es del Señor: asimismo también el que es llamado siendo libre, siervo es de Cristo. 24 Cada uno, hermanos, en lo que es llamado, en esto se quede para con Dios.
Rom. 5:8 Mas Dios encarece su caridad para con nosotros, porque siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
Rom. 8:35 ¿Quién nos apartará del amor de Cristo? tribulación? ó angustia? ó persecución? ó hambre? ó desnudez? ó peligro? ó cuchillo?... 37 Antes en todas estas cosas hacemos más que vencer por medio de aquel que nos amó... 39 Ni lo alto, ni lo bajo, ni ninguna criatura nos podrá apartar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.
1 Juan 3:2 Muy amados, ahora somos hijos de Dios, y aun no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él apareciere, seremos semejantes á él, porque le veremos como él es... 5 Y sabéis que él apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en él.
1 Juan 3:16 En esto hemos conocido el amor, porque él puso su vida por nosotros: también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos. 17 Mas el que tuviere bienes de este mundo, y viere á su hermano tener necesidad, y le cerrare sus entrañas, ¿cómo está el amor de Dios en él?
Rom. 9:1 V
Rom. 9:5 Cuyos son los padres, y de los cuales es Cristo según la carne, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén.
1 Cor. 2:14 Mas el hombre animal no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque le son locura: y no las puede entender, porque se han de examinar espiritualmente... 16 Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿quién le instruyó? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.
1 Cor. 6:15 ¿No sabéis que vuestros cuerpos son miembros de Cristo? ¿Quitaré pues los miembros de Cristo, y los haré miembros de una ramera? Lejos sea... 20 Porque comprados sois por precio: glorificad pues á Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.
1 Cor. 10:5 Mas de muchos de ellos no se agradó Dios; por lo cual fueron postrados en el desierto... 9 Ni tentemos á Cristo, como también algunos de ellos le tentaron, y perecieron por las serpientes.
2 Cor. 1:4 El cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar á los que están en cualquiera angustia, con la consolación con que nosotros somos consolados de Dios. 5 Porque de la manera que abundan en nosotros las aflicciones de Cristo, así abunda también por el mismo Cristo nuestra consolación.
2 Cor. 3:3 Siendo manifiesto que sois letra de Cristo administrada de nosotros, escrita no con tinta, mas con el Espíritu del Dios vivo; no en tablas de piedra, sino en tablas de carne del corazón.
2 Cor. 5:20 Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio nuestro; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios.
1 Juan 5:20 Empero sabemos que el Hijo de Dios es venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero: y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna.
2 Juan 1:9 Cualquiera que se rebela, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene á Dios: el que persevera en la doctrina de Cristo, el tal tiene al Padre y al Hijo.