La Epístola

Apartado 432

Administración 1

Morelia, Mich. CP 58001

#79 Marzo, 2001

Impreso en México

 

 

Noticias

Aguascalientes: La conferencia de evangelismo extranjero fue de bendición. El domingo final llenaron todos los asientos (mas de 180) incluyendo a unos ocupados por niños. Además 4 personas levantaron la mano para pedir ayuda para ser salvos, y varios levantaron la mano para ser misioneros. Oremos que Dios abre puertas para que alguna pareja de estos sea enviada para ayudar a la familia García ya enviada a Zacatecas.

Morelia: Bautizamos a 5 en febrero, y las reuniones están promediando mas de 40 adultos. Otras noticias: Guillermo Kincaid ha cambiado de número telefónico: Mi nuevo teléfono es (4) 327-7480.

León, San Juan Coecillo y San Juan Bosco ambos tenían planeado conferencias para febrero, pero no nos avisaron a tiempo. Predicó Flavio Santoyo en Coecillo, y Juan Tovar en Sn. Jn. Bosco.

Guadalajara: Cambiaron de parque los hermanos. Ahora se reúnen en el Parque San Andrés, col. San Andrés, a una cuadra del Mercado del Campesino, domingo a las 10 AM, miércoles a las 6:30 PM.

Irapuato: Han invitado a Flavio Santoyo y Rolando Espada a predicarles el 24 y 25 de marzo, sábado a las 7:30 PM, y domingo a las 10 AM.

Salamanca: Han invitado a Flavio Santoyo a predicarles durante Semana Santa, de miércoles a domingo, abril 11 a 15, noches a las 7 PM, y domingo a las 11 AM. Otras: Bautizaron a 4 el mes pasado.

Querétaro: Habrá conferencia de exhortación, de domingo, mayo 6, al domingo, mayo 13, intercambiando predicadores, uno por reunión. Han invitado a Flavio Santoyo y Guillermo Kincaid a predicar.

San Luís Potosí, Selene: Se planea una conferencia de exhortación en mayo, del 18 al 20, viernes a domingo. Predicarán Miguel Jackson, Rolando Espada y Guillermo Kincaid, noches a las 7 PM, y domingo a las 10 AM. Viernes y sábado a las 4 PM habrán estudios para los jóvenes sobre noviazgos y otros temas. Otras: Planean reconocer a otros ancianos próximamente.

León: La próxima reunión de predicadores se llevará a cabo el domingo 20 de mayo, 2001, a las 4 de la tarde.

San Luís Potosí, San Miguelito: planean una campaña de predicación pública en julio, del 16 al 21 (lunes a sábado). Solo predicadores.

Página de internet: Tenemos una página de internet, para los que no sabían, donde pueden descargar varias ediciones del Nuevo Testamento en español, y artículos de interés sobre cuestiones de las versiones. http://www.west.ga.net/~ForHim/palabra.html

Clave-centavos: Morelia - 11, San Luís Potosí, Selene - 21, La Epístola - 13. Avísanos cuando escogen una clave.

 

Celo

18 Bueno es ser celosos en bien siempre; y no solamente cuando estoy presente con vosotros.

Gálatas 4

Fanatismo ha sido causa de muchos dolores durante los siglos. No falta hoy ningún día en las noticias otro ejemplo de fanatismo violento en el cual mueren inocentes por alguna causa importante a un grupo extremo. Se critica el fanatismo, pero en nuestros días es premiado por los medios de comunicación, llenando primera plana de periódicos y revistas mundiales, y pasando en primer lugar en noticias de radio y televisión. Gobiernos democráticos también premian los fanáticos violentos cuando les dan concesiones políticas, accediendo a sus demandas de "reformas" o "justicias" particulares. Los muertos e incapacitados son olvidados, siendo víctimas no solamente de sangrientos asesinos, sino también de gobernadores demócratas afeminados que saben que su poder depende de "buenas noticias," y dan mas importancia a resultados inmediatos que a la justicia para las víctimas. Asesinos de inocentes ahora ocupan primer lugar en negociaciones políticas, y algunos son elevados a presidentes de naciones (Mandela, Arafat, y muchos mas). Pero justicia verdadera, aunque paciente, es mas fanática en su celo que los sangrientos han imaginado, y cuando les sorprende en el camino, será tarde, y arderá con un furor inimaginable.

Isa. 59:17 Pues de justicia se vistió como de loriga, con capacete de salud en su cabeza: y vistióse de vestido de venganza por vestidura, y cubrióse de celo como de manto,

Eze. 5:13 Y cumpliráse mi furor, y haré que repose en ellos mi enojo, y tomaré satisfacción: y sabrán que yo Jehová he hablado en mi celo, cuando habré cumplido en ellos mi enojo.

Dios es Celoso

Celo es pasión. Diccionarios modernos solamente aclaran los usos comunes de la palabra, pero en su sencillez, celo es pasión diligente, o mucha atención hacia algo. A veces el celo se entiende como una pasión por lo nuestro, por un amado, sea hijo o esposa. Aunque algunos se equivocan, o exceden, el celo mismo no es malo, es natural. Una leona privada de sus cachorros sería verdaderamente temible. Y mas vale a los jóvenes no atender demasiado a una señorita acompañada por un hombre celoso, sea padre o novio.

Cant. 8:6 Ponme como un sello sobre tu corazón, como una marca sobre tu brazo: porque fuerte es como la muerte el amor; duro como el sepulcro el celo: sus brasas, brasas de fuego, fuerte llama.

Celo no obstante, la violencia injusta es perversa, por supuesto. Los terroristas fanáticos recibirán lo suyo en el día señalado. El celo de los Romanistas durante los siglos para derramar sangre inocente tampoco se va a poder ocultar en el día que todo se esclarezca. Bendito día cuando las víctimas de todos los siglos verán su venganza a las manos del Dios vivo y celoso. Pero los romanistas y terroristas no están mal por ser celosos, ni celosos en gran manera. El celo no es su error. La violencia y la falta de misericordia es su prevaricación. Si fueran celosos para enseñarnos sus doctrinas, ¿quién les culparía? Si fueran fanáticos para defenderse de injusticias haciendo el bien, serían mas efectivos, y sin culpa además. Pero su celo es solamente pretexto para brutalidad, abriendo avenida para su propia saña, porque como bestias brutas, aman la violencia y la sangre.

Por los dolores que el fanatismo ha causado en el mundo es muy común menospreciar el celo, aun en cosas buenas. Cristianos mediocres se defienden en su indiferencia y pereza por no ser "fanáticos." Celo en algo malo, injusto o violento es sin duda odioso. Pero celo en bien no solamente es aceptable, es mas urgente que nunca. Yo creo que, a pesar de las angustias causadas por los extremistas, no es momento para nosotros perder nuestro ardor en nuestras doctrinas tan sumamente buenas, sanas y salvíficas. Yo lamento la falta de celo que existe entre nosotros, y somos nosotros los mas celosos de sana doctrina que yo conozco.

Celo en Arrepentimiento

Apoc.3.19 Yo reprendo y castigo á todos los que amo: sé pues celoso, y arrepiéntete.Una cosa que he visto año tras año en las iglesias, e incluso en mí, es una falta de victoria sobre pecados comunes, que nos "rodean". Una razón mayor es la falta de celo en nuestro arrepentimiento. La facilidad de perdón en la vida de un cristiano no debe en ninguna manera ocultar la exigencia de arrepentimiento celoso, fanático y diligente. Hay muchos ejemplos relevantes. Como pastores tenemos que tratar con conflictos personales entre hermanos, pero tales conflictos demasiadas veces resultan en chismes, calumnias, odios, y hasta injurias. El conflicto personal es difícil resolver, pero los chismes e injurias son pecados obvios, que requieren regaño directo. El hermano que ha "caído" en chismes, o calumnias o peor, casi siempre se arrepiente inmediatamente cuando es enfrentado por los pastores, especialmente cuando tenemos las ofensas bien "documentadas". Pero demasiadas veces el arrepentimiento es mediocre. La amargura o el odio todavía existe, y el arrepentimiento, o aun la confesión de la injuria, es solamente un paso penoso impuesto por los pastores, y están dispuestos a cumplir, pero no proviene del corazón. Luego volverán a lo mismo.

Aun en pecados más graves lo mismo sucede. Yo siempre temo de recibir a los hermanos fornicarios, adúlteros, borrachos o contenciosos otra vez a las reuniones, aún imponiéndoles una confesión pública, porque ocurre que tal hermano que habíamos corrido, aunque está dispuesto a humillarse en frente de todos, y quizás es verdaderamente triste por su pecado, demasiadas veces no cumplirá su arrepentimiento con el celo adecuado a la gravedad de su ofensa. Es natural que el penitente querrá olvidar su pena, su vergüenza, y quiere recuperar lo perdido, pero no debe olvidar que un pecado grave es una vergüenza no solamente a él, sino a toda la iglesia, y no es fácil que personas con carácter superen una pena así. Es demasiado fácil para personas con poca nobleza superar su vergüenza, y se imaginan recuperadas desde las primeras expresiones de compasión. Pero la única cosa que permite a las personas honestas, decentes y honorables en la iglesia superar la pena de pecados graves entre nosotros es una diligencia y celo en el arrepentimiento del penitente. Si el arrepentido no se muestra sincero en su quebrantamiento, franco en su confesión, humilde en su comportamiento, y apasionado en su mejoramiento, su misma cara llega a ser una pena cada vez que aparece.

¿Cómo es posible para un hermano que hace poco confesó adulterio pararse en la reunión y predicar con impertinencia o soberbia? ¿Cómo puede un chismoso "arrepentido" luego empezar a regañar a otros? No es posible para un hermano triste, humillado, quebrantado y apasionado para recuperarse, comportarse ligeramente. Yo no puedo juzgar el corazón, pero cuando veo tales portándose sin pena, yo sé que nos esperan mas episodios, mas daños, mas penas futuras. Como pastor, cómo me canso de arrepentimiento superficial, tan fácil, tan inútil. ¿Dónde están los hermanos que son celosos en arrepentimiento?

En mi opinión todo arrepentido debe cumplir cuatro cosas para celar su recuperación. Primero, debe hacer pasos definitivos en contra de su pecado. Esto quiere decir que el penitente debe desarrollar un plan para no caer otra vez en lo mismo, y no debe valerse de libertades comunes que le dejan en riesgo. El borracho debe hacerse enemigo de todos los que le invitan a un trago, y debe mantenerse sin dinero en la bolsa para que tenga que llegar a casa después del trabajo. El fornicario debe romper el noviazgo, evitar la televisión o cine, evitar ociosidad, en fin, hacer "derechos pasos para sus pies."

Segundo, el arrepentido debe ignorar, desoír y desconsiderar cualquier pecado de otro. El verdadero arrepentido no se preocupa de las culpas alrededor, sino se internaliza, viendo su propio pecado como más importante que todos los demás.

Tercero, debe ser franco en todo caso acerca de su culpa pasada. Jamás debe pretender que nada pasó, jamás debe evitar una nueva confesión de su pasado cuando alguien inadvertidamente lo menciona. Debe ser pronto para admitir, y serio para repugnar su propia debilidad anterior.

Cuarto, debe evitar cualquier comportamiento que puede parecer ligero al respecto. Debe pensar no solamente de su propia pena, sino también de la pena de otros que fueron afectados. Debe ser sobrio, serio, grave en su porte. Esto no es para afectar humildad, ni es hipocresía. Es consideración de la pena sentida por otros. Verdadero arrepentimiento produce emociones fuertes, decisiones fanáticas, y actitudes visibles.

2 Cor. 7:11 Porque he aquí, esto mismo que según Dios fuisteis contristados, cuánta solicitud ha obrado en vosotros, y aun defensa, y aun enojo, y aun temor, y aun gran deseo, y aun celo, y aun vindicación. En todo os habéis mostrado limpios en el negocio.

Cuando no es visible el actitud de arrepentimiento, "pecado está a la puerta."

Celo en Adoración

Hec. 22:3 Yo de cierto soy Judío, nacido en Tarso de Cilicia, mas criado en esta ciudad á los pies de Gamaliel, enseñado conforme á la verdad de la ley de la patria, celoso de Dios, como todos vosotros sois hoy.

El siglo moderno, con su prosperidad, materialismo, prisa y liviandad ha obliterado el celo en adoración. Nuestros antepasados eran más prontos, diligentes y fanáticos en su devoción a Dios. Religión fácilmente se degenera en rutina, sacramentalismo, y rito sin sentido. No hay pavor ni asombro en nuestras meditaciones, no hay emoción ni sentimiento en nuestras alabanzas, no hay soltura ni entrega en nuestra devoción.

Hace escasamente una generación, hombres no atenderían a una reunión (ni a misa) en ropa diaria, sino se vestirían en su mejor vestido o traje para atender a la "casa de Dios." Yo me acuerdo de mis padres, que en mi juventud no comprarían nada el día de domingo, ni comida, ni gasolina. No me malentiendes. Yo no creo que debemos regresar a tales normas que también tendían a sacramentalismo y auto-engaño religioso. Pero yo sí lamento la falta de celo en adoración que ha suplantado el legalismo de religiosidad.

Para celar en adoración creo que algunas cosas serán obvias. Una es fanatismo bíblico, quiero decir, pasión acerca de la Biblia, sus palabras y sus doctrinas. Debe existir entre nosotros un celo bíblico que sobrepasa nuestros antepasados, pues si soltamos el peso de religiosidad hueca, que no perdamos la pasión de lo verdadero. Cristianos entre nosotros deben ser apasionados acerca de lectura y conocimiento bíblico. ¿Dónde están los hermanos entre nosotros que han leído la Biblia por lo menos una vez al año desde que se convirtieron? (Y aun eso es poco.) La falta no es en la enseñanza. Enseñanza por naturaleza es limitada. Los que verdaderamente se maestrean en la Biblia son los que la celan en gran manera.

Sal. 119:139 Mi celo me ha consumido; Porque mis enemigos se olvidaron de tus palabras.

Otra cosa es la reunión. El que es fanático en adoración asiste a las reuniones, por supuesto. Todas las reuniones, por supuesto. Y llega a tiempo, por supuesto. Siempre. Pero no solamente asiste, también atiende a las reuniones. Quiero decir que le es importante la reunión, y está despierto, interesado, involucrado, e invertido en la reunión. Y la reunión así se mantiene como debe, la mayor muestra de adoración a nuestro bendito Señor Jesús.

Aunque hay muchas, mencionaré una mas, la oración. Oración es mucho trabajo, sin duda, pero también es un acto de adoración, y se me hace que nuestra vida rogativa es la mejor indicación de nuestro celo en adoración. Piénsalo hermano, si no oras celadamente, es porque estás muy contento sin Dios en tu vida. ¿Qué tiene que hacerte Dios para que le busques?

Celo en Buenas Obras

Tito 2:14 Que se dió á sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad, y limpiar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.

Es una actitud fea, la de los católicos, que piensan que las buenas obras consisten en dar limosnas a los pordioseros, y que por esas miserias se salvan, o por lo menos se acercan a la salvación. Su "parábola" favorita está en Mateo 25 donde Jesucristo apremia los de su derecha que ayudaron a los pobrecitos, porque en hacerlo estaban ayudándole a él mismo. Se imaginan obtener el favor de Dios por sus pequeñitas señas de compasión a su prójimo, y pasan por alto todas las demostraciones pesadas de su odio hacia ellos, su egoísmo extremo, sus guerras, rencores, amarguras, brutalidad, calumnias, desprecios, y esto sin mencionar sus faltas en todo lo más importante de la ley de Dios. Tan despreciable es esta actitud a un cristiano verdadero que difícilmente nos persuadimos a hacer cosas semejantes que pueden ser vistas como mas de lo mismo. Sin embargo, creo que cuando el apóstol habla de "buenas obras," está hablando de cosas al estilo. Debemos ser celosos acerca de nuestras oportunidades de hacer bien a nuestro prójimo, y no perderlas por la hipocresía abominable de religiosos.

Celo en la Obra

Juan 2:17 Entonces se acordaron sus discípulos que está escrito: El celo de tu casa me comió.

Una cosa mas, creo que debe existir en nosotros, especialmente en los pastores, misioneros y predicadores, un celo extremo acerca de la obra y el llamamiento de Dios.

Demasiadas veces veo yo una actitud casual entre nosotros acerca de la obra, y nuestras fallas, derrotas, debilidades, pecados y fracasos. ¿Cómo es posible que un pastor acepte resignadamente las noticias que otro hermano ha "caído?" ¿Cómo podemos dar malas noticias a nuestros compañeros mes tras mes sin movernos a una pasión fanática para corregir el problema? No vemos resultados y nos confortamos en la "prueba" de nuestra fe. La iglesia sigue pequeña y nos animamos de todos modos. No necesitamos más paciencia en estos casos, hermanos, necesitamos celo. No hay lugar para pastores y predicadores dormilones que se contentan con su congregación aunque no ha crecido en años. El celo de un pastor es ver crecimiento, y no solamente en una congregación pequeña. Nunca, por numeroso que sea nuestro grupo, debemos estar satisfechos con una congregación estable. Si no está creciendo tu iglesia, hermano, ponte celoso acerca de tu obra. Jesucristo no nos mandó a nosotros "aguantar hasta el fin," ni preparar las defensas, sino nos mandó "destruir fortalezas."

1 Rey. 19:10 Y él respondió: Sentido he un vivo celo por Jehová Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel han dejado tu alianza, han derribado tus altares, y han muerto á cuchillo tus profetas:

Demasiados pastores son negligentes en cuanto al futuro. Le toca al pastor estar siempre preparando el paso siguiente. ¿Hay suficiente lugar para crecer donde están reuniéndose? ¿Cómo puedes crecer, tienes algunas ideas? ¿Qué podemos hacer para mejorar la reunión? ¿Qué es menester para involucrar mas hermanos en la obra? ¿Cómo puedo yo proveer un ministerio digno, y no competitivo, para tal hermano? ¿Porqué no hemos enviado mas misioneros? ¿Sería de provecho dividirnos en dos grupos? Si tu no estás preguntándote estas cosas todos los días, te hace falta el vivo celo para la obra. El éxito del pastor es que siga creciendo la obra durante toda su ministración. El que entrega la obra con los mismos que le fueron entregados será regañado por el gran pastor de las ovejas, que exige lo suyo con ganancia, por lo menos usura. No hay lugar para miedo, timidez, desidia o pereza. Si tu obra sufre, corrígela, anímala, energízala. ¿Porqué te esperas? ¡Célate!