La Epístola

Apartado 432

Administración 1

Morelia, Mich. CP 58001

#59 Julio, 1999

Impreso en México

 

Noticias

Aguascalientes: La iglesia va a tener una conferencia de exhortación desde jueves, julio 29 hasta domingo, agosto 1. Predicarán dos por noche, y dos el domingo en la mañana. El horario es lo siguiente:

Jueves 29 Ramiro García Guillermo Kincaid

Viernes 30 Miguel N. Jackson Flavio Santoyo

Sábado 31 Flavio Santoyo Ramiro García

Domingo 1 Miguel N. Jackson Guillermo Kincaid

Su edificio se encuentra en Mitla # 117, Colonia Pirámides, a dos cuadras del edificio Inegi. Alguna pregunta pueden comunicar con Román Rojas (49) 77-27-80. Como siempre son bienvenidos los hermanos, aún para quedar la noche, pero les avisan de traer su propia cobija. Por otra parte nos avisan que están predicando tres veces por semana y tienen alrededor de 14 predicadores fieles. Están predicando los domingos en la tarde en los pueblos alrededor.

León: Tendrán una conferencia de evangelismo extranjero desde jueves, agosto 18 hasta domingo, agosto 22. Se invitarán los evangelistas enviados de León, y quizás algunos otros para compartir. También todos los que quieren participar son bienvenidos, solamente traigan su propia cobija. Habrá reunión de predicadores el domingo 22, a las 4 de la tarde, y si no avisamos otro, será en la casa de Juan Córdoba otra vez. Preguntas diríjanse a Juan Córdoba (47) 78-15-64.

San Juan Bosco: Bautizaron a 14 el mes pasado, tienen entre 8 y 10 predicadores fieles.

San Juan Coecillo: Bautizaron a 11 el mes pasado, y tienen 15 predicadores. Están predicando 4 veces por semana.

Parque Hidalgo: Bautizaron a 20 el mes pasado, y tienen entre 20 y 22 predicadores fieles. Su grupo tiene alrededor de 150 adultos entonces piensan dividirse otra vez en dos grupos en el mismo parque.

Salamanca: Nos avisan que tendrán una conferencia en septiembre, desde viernes 17 hasta domingo 19. No sabemos todavía la naturaleza de la conferencia. Nos avisan que tienen 5 predicadores fieles ahora.

Celaya: Los hermanos están haciendo planes de irse a otra ciudad. No quieren ir demasiado lejos, así que piensan visitar y predicar en algunas de las ciudades mas grandes a su alrededor, como Pénjamo, La Piedad, Valle de Santiago, Acámbaro, etc. para después escoger una. Noé Castillo piensa irse en noviembre, porque el contrato de renta de su casa se vence entonces. Flavio Santoyo luego piensa alcanzarle el verano que sigue cuando sus hijos salen de clases. Alberto Sotelo luego piensa irse un año después.

Querétaro: Han crecido mucho en su parque y están pensando en dividirse los domingos en dos parques centrales. Hay 8 predicadores ahora predicando por lo menos una vez por semana. Tanto éxito han visto en sus predicaciones que las autoridades están fijándose, y hay ciertos problemas. Oremos que su ministerio no sea impedida.

Guadalajara: Tienen entre 10 y 15 fieles en sus reuniones, y hay dos para bautizar próximamente. Hay dos predicadores fieles aparte de los evangelistas de León.

La Gloria del Varón

7 Porque el varón no ha de cubrir la cabeza, porque es imagen y gloria de Dios: mas la mujer es gloria del varón.

1 Corintios 11

Este texto sorprendente de Pablo dice en efecto que el hombre es imagen y gloria de Dios en alguna manera que la mujer no es. Esta frase, "imagen de Dios," viene originalmente de Génesis.

26 Y dijo Dios: Hagamos al hombre á nuestra imagen, conforme á nuestra semejanza; y señoree en los peces de la mar, y en las aves de los cielos, y en las bestias, y en toda la tierra, y en todo animal que anda arrastrando sobre la tierra.

27 Y crió Dios al hombre á su imagen, á imagen de Dios lo crió; varón y hembra los crió.

Génesis 1

También la misma idea es mencionada muchas veces:

1 ESTE es el libro de las generaciones de Adam. El día en que crió Dios al hombre, á la semejanza de Dios lo hizo;

2 Varón y hembra los crió; y los bendijo, y llamó el nombre de ellos Adam, el día en que fueron criados.

Génesis 5

6 El que derramare sangre del hombre, por el hombre su sangre será derramada; porque á imagen de Dios es hecho el hombre.

Génesis 9

29 Siendo pues linaje de Dios, no hemos de estimar la Divinidad ser semejante á oro, ó á plata, ó á piedra, escultura de artificio ó de imaginación de hombres.

Hechos 17

9 Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos á los hombres, los cuales son hechos á la semejanza de Dios.

Santiago 3

Es claro por todos estos versículos que todos los hombres son hechos en imagen y semejanza de Dios, aún hombres inconversos, Además, por el mismo contexto esta semejanza incluye a las mujeres también, pues la referencia original dice, "varón y hembra los crió," y al repetirlo dice que "llamó el nombre de ellos Adam" (Gén. 5.2). Pero luego Pablo nos dice en el contexto de las diferencias entre el varón y la hembra, que el "varón" es "imagen y gloria" de Dios, mientras la mujer es sencillamente la "gloria del varón." No es una contradicción como veremos. Y lejos de ser un menosprecio al valor de la mujer, veremos que esto nos enseña algo sumamente importante acerca de nuestra relación con nuestras mujeres.

Creación Singular

20 Y puso Adam nombres á toda bestia y ave de los cielos y á todo animal del campo: mas para Adam no halló ayuda que estuviese idónea para él.

Génesis 2

Algunas veces he oído burlas acerca de la historia de creación precisamente por la forma en que Dios hizo al hombre dormir para sacarle una costilla, y así formar una mujer de la costilla del hombre. Una mujer muy femenista que conocemos insiste que esta cosa es absurda. Ella piensa que esto devalúa a la mujer, haciendo parecer que ella era solamente una idea tardía, como algo que se le ocurrió a Dios al último momento. Otros han burlado la idea que Dios estuviera buscando entre los animales una pareja ideal para Adam, y por no encontrar ninguna, formar así la mujer. Pero un poco de atención al texto aclara que eso no es lo que pasó. Aún antes de este texto dice que Dios estaba preparando hacerle una pareja.

18 Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; haréle ayuda idónea para él.

Génesis 2

El hecho que Dios trajese a Adam las bestias del campo que había criado para "ver cómo les había de llamar" no significa que estaba buscando entre ellas una que le serviría. ¡Vaya, que estos no dan a la Biblia ninguna consideración! Obviamente la observación de Dios a las bestias del campo nos relata que Dios no quiso hacer la pareja de Adam en la misma semejanza que las había hecho a las bestias. El humano era hecho en semejanza de Dios, y su mujer tenía que reflejar lo mismo. El relato de la creación de la mujer muestra que ella tiene diferente relación con el hombre que tienen las hembras de los animales. Esa diferencia empieza en su misma creación.

23 Y dijo Adam: Esto es ahora hueso de mis huesos, y carne de mi carne: ésta será llamada Varona, porque del varón fué tomada.

Génesis 2

Ella era hueso de sus huesos, y carne de su carne. La relación entre varón y mujer es muy diferente que las relaciones de animales, por su creación, tanto en lo físico, en lo espiritual, y en nuestra relación con Dios. En lo físico el deseo del hombre para la mujer es perseverante y profundo, aunque no es así en ninguno de los animales creados. Entre los animales siempre el macho es mas hermoso, colores mas brillantes, aspectos mas sobresalientes. Pero entre nosotros la mujer es la hermosa, y no solamente a los hombres, sino también a las mismas mujeres que se comparan entre sí mismas. Aún es hermosa a los ángeles (Gén. 6.2). No hay nada en la creación que compara con la belleza natural de la mujer.

Además, la mujer es sensual, siendo la única hembra en la creación natural que es siempre sexual, criando o no criando hijos. Esta atracción sexual hacia la mujer existe en los hombres desde la pubertad hasta la muerte, y arde fuera de control con solamente una pequeña chispa. A cambio, ningún animal en la creación es atraído a la hembra de su especie sino en temporadas de "celo," y eso no por la simple vista, sino por complejas reacciones hormonales en sus cuerpos. ¿No ves que Dios quiso que la mujer sea siempre deseada, el tesoro mas codiciado, el objeto de la mas alta ambición natural humana?

Sin embargo, esta innegable atracción física, aunque no existe en ningún animal así, no debe ocultar otro criterio de la creación extraordinaria de la mujer. Desde el punto de vista espiritual, la mujer fue creada como compañera (Gén. 3.12), pues lo primero que dijo Dios es que no quería que el hombre esté "solo" (Gén. 2.18). Ninguna de las parejas de los animales del campo cumplía este gran diseño de Dios. Este aspecto de su creación es recalcado por Dios como propósito de su diseño original (siendo ella su compañera, Mal. 2.14), y era una prenda singular de un Creador considerado. Dios hizo al hombre y a la mujer diferentes, y a propósito, no solamente en lo físico y en lo sexual, sino también en su carácter, sus valores y en su auto-estima. Esta diferencia en su espíritu es imperativa, pues ella es la ayuda idónea al hombre, la pareja perfecta. Es necesario que sean diferentes, y, pues, como dicen los franceses, "viva la diferencia."

Otro aspecto de la creación especial de la mujer es en nuestra relación con Dios. Para entender bien este criterio necesitamos considerar lo que significa la frase, "imagen y semejanza de Dios." Hay tres sentidos importantes que damos a esta frase, el sentido de apariencia, el sentido de naturaleza, y el sentido de representación.

El Sentido de Apariencia

Lo mas obvio de la frase "imagen y semejanza de Dios," es la que se usa acerca de los hijos también, pues algunos hijos son "la misma imagen de sus padres."

3 Y vivió Adam ciento y treinta años, y engendró un hijo á su semejanza, conforme á su imagen, y llamó su nombre Seth.

Génesis 5

La "semejanza" de Dios habla de una similitud, un parecido, una copia de Él. Indica una apariencia o aspecto similar. Sencillamente la frase está diciendo que parecemos a Dios. Este sentido alega que la raza humana, incluyendo la mujer, fue hecha en semejanza de Dios, que tenemos un aspecto (o mas) que parece a Dios. No creo que esto significa que Dios tiene una cara como nosotros, o que tiene diez dedos, o en fin. Obviamente la naturaleza de Dios es espiritual (Juan 4.24), así que esta semejanza será también espiritual. Por ejemplo, Dios es "tri-uno," y reconocemos que el hombre es tres en uno también (1 Tes. 5.23). Tiene cuerpo (lo visible), tiene alma (la voluntad y la razón que habitan en el cuerpo), y tiene espíritu (la personalidad, el carácter, la naturaleza básica del ser). Este sentido de la frase se entiende luego porque Dios dice, "hagamos al hombre a nuestra imagen" (Gén. 1.26). En el otro lado del mismo, Dios es único, como también cada persona humana es única. Solamente el humano es inmediatamente reconocible por una sola vista a su cara. Aunque vemos miles de caras todos los días, y todas son básicamente iguales, reconocemos la cara de un individuo conocido en un instante. Ningún animal es así. Otros sentidos de estas semejanzas a Dios incluyen que Dios es creador, como también lo es el hombre. Dios es emocional, como también es el hombre, siendo el único "animal" que llora, que se ríe, que se sonríe, o que guarda rencor. Estas semejanzas a Dios seguramente son el significado primero de la frase.

El Sentido de Naturaleza

Sin embargo, hay otro sentido inherente en la frase "imagen y semejanza de Dios." Obviamente el hombre es un verdadero ser espiritual, no solamente tiene apariencias similares a Dios, sino en su misma naturaleza es semejante a Dios. En este sentido el hombre es "linaje de Dios" (Hec. 17.29). Dios es moral, una voluntad que hace decisiones y juicios. También lo es el hombre (incluyendo a la mujer). Dios tiene autoridad y responsabilidad, como también tenemos los humanos. Dios es espiritual, un ser eterno, mas alto que la creación natural, como también lo son los ángeles, y por su creación especial, lo es el hombre también (Sal. 8.6). El hombre es como Dios en su misma naturaleza, y en efecto, la Biblia nos llama "dioses" (Exo. 4.16, 7.1, Sal 138.1, Juan 10.34, etc.). Somos por naturaleza su imagen y semejanza, por lo menos en parte.

El Sentido de Representación

Quizá el sentido mas interesante de esta frase es la de representación. Si te pones a observar y considerar la creación, verás que casi todo lo creado es imagen de algo. La Biblia aclara muchas de estas semejanzas, pues Jesús y Pablo aclaran que plantar una semilla es una semejanza de muerte, y que su nacimiento de la tierra es semejanza de la resurrección (Juan 12.24, 1 Cor. 15.36-38). El mismo matrimonio, nuestra naturaleza sexual, es una imagen de la relación entre Dios y los humanos (Isa. 54.5, Efe. 5.32, etc.). Las semejanzas declaradas en la Biblia son muchísimas, las estrellas representan los ángeles (Apoc. 1.20, 12.4,9, etc.), el sol representa a Dios (Sal. 84.11), la luna representa la iglesia (la simiente del hijo de David, Sal. 89.36,37), y en fin. Con cuidado podemos ver muchas mas semejanzas en la naturaleza que ni la Biblia menciona, pero no hay tiempo ahora de alegarlas. Lo importante aquí es reconocer que la creación es imagen de algo superior, es una sombra o una figura de cosas eternas.

En la cumbre de esta panorama encontramos al hombre, hecho en imagen y semejanza de Dios. El hombre ocupa el principal lugar de la creación natural, pues ocupa el lugar de Dios. Pero la creación de los humanos fue también una semejanza de algo eterno. La Biblia enseña que una mujer no será femenina para siempre, es femenina hasta que termina la escena presente. En la resurrección no habrá matrimonio (Mat. 22.30), y aun la mujer es hombre en su interior (1 Ped. 3.4). Así que, la diferencia entre la creación de la mujer y la del hombre tiene un significado mas allá de nuestra existencia natural. Nuestra creación es un símbolo, una sombra, una obra maestra de teatro. La inclinación perversa de nuestra generación de destruir esta semejanza ha causado una continua degeneración humana. La teoría de evolución imagina al hombre como un simio afortunado, que por ventura se descendió de los árboles, perdió su cola y su pelaje, y que ahora se encuentra pelado y contemplando su existencia innoble y desgraciada. Infeliz el hombre que se considera un selvático chango y no busca mas en la vida que mondarse las pulgas y pelearse los cacahuates que se le tiran. Cómplice es la mujer que desprecia su creación singular por competirse con el hombre, intentando masculinizarse, o afeminar al hombre.

La manera que nos creó Dios, y el diseño que nos dio es una imagen y semejanza que importa a Dios. No solamente reconocemos el papel del humano en este drama de naturaleza, reconocemos que la misma relación entre el varón y la mujer es un teatro divino que Dios observa, y si no le entretiene, por lo menos le interesa a Dios profundamente. En este sentido vemos que el varón tiene que cumplir un cierto papel en su matrimonio, mientras la mujer tiene otro papel que cumplir. Aunque esta semejanza principalmente refiere al matrimonio, afecta todo aspecto de la vida presente, afecta la misma sociedad también. En esta generación las sociedades modernas han menospreciado los papeles que Dios nos ha dejado. No siempre fue así. Antes de nuestra generación la misma sociedad incrédula entendía los papeles distintos de varón y hembra. Un hombre tenía la autoridad y la responsabilidad, no solamente de su familia, sino también por su sociedad. Se veía indecoroso que una mujer mande en la familia o aun en una empresa. La idea que una mujer pelee en guerra, o que se haga policía o bombero era inimaginable. Pero todo esto ha cambiado en nuestra generación.

Una de las razones que las sociedades antiguas guardaban los roles originales era por necesidad. La vida era mas dura, trabajo era mas físico, había menos educación, menos oportunidades, y las mujeres no tenían la libertad de sostenerse solas. Pero en una sociedad industrial hay pocos trabajos que hacen los hombres que una mujer no puede también hacer. Esto da a ellas mas oportunidades y mas libertad, y de consiguiente, les da a ellas mas autoridad y responsabilidad.

Esta situación no es todo malo. Creo que la historia del mundo ha seguido una trayectoria intencional, creo que Dios quiso desde el principio que llegáramos a este punto. Creo que con la prosperidad la mujer tenía que recibir mas libertad y mas oportunidad que en otros tiempos. ¡Qué bien! Por supuesto no menosprecio la nobleza de mujeres que son madres en casa, pero a la vez yo quiero que mis hijas tengan todas las oportunidades posibles para ellas, y quiero que tengan la libertad de no casarse, de proveer por sí mismas si así lo quieren. No es malo que la mujer sea independiente del hombre, y aún Pablo refiere a esta libertad como algo bueno y preferido.

38 Así que, el que la da en casamiento, bien hace; y el que no la da en casamiento, hace mejor.

40 Empero más venturosa será si se quedare así, según mi consejo; y pienso que también yo tengo Espíritu de Dios.

1 Corintios 7

Sin embargo, esta libertad, aunque proyectada por Dios, no habla de matrimonio, habla del estado de soltera. Pero la incredulidad en nuestra sociedad quiere ahora negar el orden original de la creación aún en el hogar. El gobierno mismo pasa comerciales en la televisión tijereteando el guión del varón aún en el hogar, insistiendo que debe haber igualdad de la mujer en todo. Claro, muchas mujeres están de acuerdo, y lamentablemente, muchas mujeres cristianas también. Los hombres mismos están confusos acerca de sus propias responsabilidades hacía la mujer. La sencillez de antaño ha perecido.

Aunque yo sé que los hombres somos muchas veces miserables dechados de Dios en el hogar, el remedio no es desechar el diseño original de la creación. Y tampoco es el remedio insistir que las mujeres se esclavicen otra vez como nuestras abuelas. El remedio es que el hombre, por poco reconocimiento que le dan ahora, cumpla su papel como representación de Dios en el hogar cristiano.

Imagen y Gloria de Dios

Considera la frase de Pablo, "la imagen y gloria de Dios." Esto habla del varón, no de la mujer. La mujer es la "gloria del varón." ¿Pero en qué sentido podemos los varones imaginarnos la imagen y gloria de Dios? Precisamente en el sentido representativo. ¿No ves, hermanos, que Dios está observándonos, deseando vernos imitarle, especialmente en el hogar? ¿No ves que su interés es formar hombres que le asemejan, en su carácter, en su amor, en su deseo y en su sacrificio? Quiso formarnos como verdaderas imágenes de Dios, o pequeñas copias de Dios. Dios nos creó en la semejanza de él, y por eso nos ama, por eso tiene cuidado de nosotros, no solamente los varones, ni solamente creyentes, sino a todos los hombres, pues todos son hechos en su semejanza. Por eso tuvo piedad de los hombres de Nínive (Jonás 4.11), por eso tenemos que tratar con respeto y dignidad a cada humano (Gén. 9.6, Sant. 3.9), porque fueron hechos a su semejanza. Dios los ve como su propio linaje (Hec. 17.29).

En el sentido de representación, el varón es imagen y gloria de Dios. A cambio la mujer fue creada en semejanza del hombre. Dios la formó de la costilla de Adam, y ella era hueso de sus huesos y carne de su carne, hecha como él, para que él la amara. La mujer es la gloria del varón y es importante a Dios que la veamos así. Dios quiere vernos imitarle en nuestra relación con nuestras mujeres. Los incrédulos que no reconocen la forma de su creación no pueden entender la importancia que tiene nuestro amor hacia ellas. Entran al matrimonio con emociones de "enamorados," pero tienen esperanzas de ser servidos, o consentidos por ellas. Nunca reconocen su responsabilidad de amar a su mujer como a sí mismo, no por la emoción de los halagos mutuales de noviazgo, y ni siquiera para mejorar su matrimonio, sino para alegrar a Dios.

25 Maridos, amad á vuestras mujeres, así como Cristo amó á la iglesia, y se entregó á sí mismo por ella,

28 Así también los maridos deben amar á sus mujeres como á sus mismos cuerpos. El que ama á su mujer, á sí mismo se ama.

29 Porque ninguno aborreció jamás á su propia carne, antes la sustenta y regala, como también Cristo á la iglesia;

33 Cada uno empero de vosotros de por sí, ame también á su mujer como á sí mismo; y la mujer reverencie á su marido.

Efesios 5

Dios hizo a la mujer de la costilla de Adam como base para un amor extraordinario. Este amor del varón a su mujer por cumplir el papel que Dios nos dio, implica varias cosas. Aunque el varón piensa demasiadas veces que amor a su mujer significa "proveer" por ella económicamente, y no negamos la importancia de eso (1 Tim. 5.8), la verdad es que amor a su mujer es mucho mas profundo. Yo veo varios aspectos del amor necesarios para cumplir la semejanza en que Dios nos creó.

Dejar y Allegarse

4 Por tanto, dejará el hombre á su padre y á su madre, y allegarse ha á su mujer, y serán una sola carne.

Génesis 2

Hay algunas cosas que se aclaran desde el principio. Vemos el mandamiento de "dejar a su padre y a su madre y allegarse a su mujer." Este mandamiento es doble, dejar y allegarse. Significa que la lealtad familiar se cambia. La devoción que un chavo tuvo por su mamá se debe cambiar completamente a su mujer. Dejar padres es una parte integral de esto. La pareja que vive en la casa de sus padres no está cumpliendo el mandamiento. No es que nunca hay circunstancias inevitables, pero el mandamiento es claro. Aún las parejas que tienen la necesidad por un tiempo deben dejar la casa de sus padres a primera oportunidad. Proveer por ella seguramente incluye darle un hogar que es de ella sola, aún si el suelo es de tierra, pero donde no manda la suegra, donde puede criar sus niños con orden, y donde puede esperar a su esposo con orgullo. Es un ingrediente importante al dechado de Dios.

Allegarse a su mujer habla de la entrega física del sexo, pero también habla de la presencia del hombre en el hogar. El hombre que llega a casa solamente para cenar, dormir o "hacer el amor" no está cumpliendo. El hombre debe estar presente con su esposa cuando no está trabajando, y debe llevar a su esposa consigo cuando sale a recrearse. La norma perversa de hombres machos que tienen a sus mujeres en casa con los niños mientras pasean con sus compañeros, jugando deportes o frecuentando los bares es bestial. En primer lugar es muy importante que los papás estén presentes con sus hijos y sus hijas. Es importante que los disciplinen, y es importante que les muestren cariño y afecto físico, a sus niños y sus niñas, aún cuando son grandes. Es destructivo a los hijos no tener papá presente, sin duda, pero fíjate que Dios no dijo, "estáte con tus niños." Dijo, "allegarse a su mujer." La principal preocupación de Dios desde el principio era cómo tratamos a nuestras mujeres. Ella necesita tu presencia, tu cariño y tu atención. Y Dios está mirando.

Pero "allegarse" también habla de una entrega emocional. Debe haber una confianza, una intimidad emocional entre un hombre y su mujer, una comunión dulce, una buena plática que dura la vida. Esto no sucede por accidente. Es resultado de esfuerzo. Un hombre debe aprender hablar con su mujer con respeto, confesar su amor, y agradecerla aún por sus pequeños servicios. Si el matrimonio ha perdido las palabras "gracias," "por favor," y "lo siento," la culpa casi siempre está en el varón. Es triste el matrimonio en que no hay benignidad por parte del hombre. Y la benignidad hacia tu mujer no solamente es agradable a uno, le da verdadero placer a Dios.

Alegrarla

Otra cosa yo veo cuando pienso en la mujer creada como "gloria del varón" es que Dios quiso que los hombres agradáramos a nuestras mujeres (1 Cor. 7.33).

5 Cuando tomare alguno mujer nueva, no saldrá á la guerra, ni en ninguna cosa se le ocupará; libre estará en su casa por un año, para alegrar á su mujer que tomó.

Deuteronomio 24

Lo sobresaliente de este versículo no es que Dios le da al hombre un año libre de guerra, lo sobresaliente es la razón que lo da. Dios quiere que la mujer que tu tomas sea alegre. Los hombres somos naturalmente tan egoístas que automáticamente pensamos que Dios está dándonos una licencia merecida por habernos casado. Pero no es el caso. Dios te da un año para alegrar a tu mujer. ¿Nunca has visto tu responsabilidad, hermano, de alegrar a tu mujer? ¿Nunca has pensado que Dios se alegra cuando tu la alegras? Yo creo que mientras los hombres se preocupan de ser servidos y obedecidos por sus mujeres desagradan a Dios. El hombre debe preocuparse por alegrar a su mujer, y que solamente esa actitud puede alegrar a Dios en nuestro matrimonio. Yo sé que una rosa no es sustituto de un amor verdadero, pero verás que alegría en el hogar a veces cuesta solamente 20 pesos por decena. Aunque te sea difícil creer, el rostro alegre de tu mujer siempre agrada a Dios, porque tiene que ver con su propósito original en la creación.

Honor

7 Vosotros maridos, semejantemente, habitad con ellas según ciencia, dando honor á la mujer como á vaso más frágil, y como á herederas juntamente de la gracia de la vida; para que vuestras oraciones no sean impedidas.

1 Pedro 3

La creación misma nos hizo diferentes que nuestras mujeres, y para acabar pronto, tú nunca vas a poder entenderla completamente, ni porqué se enoja, ni porqué se teme, ni porqué llora. Pero Dios te dice habitar con ellas según ciencia. Ciencia requiere experimentos y pruebas, para llegar a conclusiones. Si tú ves que algo innecesario perturba a tu mujer, no lo hagas. Si tú ves que algo fácil la alegra, hazlo. Esa sí es ciencia.

Pero algo en este versículo me recuerda de la creación misma. Dice Pedro que ella es un vaso más frágil. Mujeres mundanas no aceptan esta observación tan científica, insistiendo que ellas viven mas años, aguantan el dolor del parto, y en fin. No les prestes atención, hermano, tu mujer es mas frágil que tú. Pero la conclusión de esta observación no es que la cuides mas, sino que le des honor. Ella no es mucho mas frágil, hay poca diferencia. Ella sí se puede cuidar sola, si es necesario. La diferencia intencional era para que le des el lugar de honor. Caballerosidad casi ha desaparecido en nuestra generación pero era una de las características insignes del "cristianismo" desde los apóstoles. El abrir la puerta para una mujer no es porque no puede ella. Aunque es mas débil, sí puede. Abrimos la puerta, y esperamos que entre primero porque a Dios le interesa que demos a nuestras mujeres el primer lugar, el primer asiento, la primera consideración. Si se te hace una tontería es porque eres un tonto. Hace una sola generación un hombre no se sentaba en presencia de una mujer, hasta que ella se sentaba. Hace una generación se quitaba la gorra en presencia de una mujer, no por alguna necesidad, sino por darle honor. Nuestra generación no entiende el motivo de estas tradiciones y por eso las ha abandonado, pero como cristianos tenemos que volver a ellas, para cumplir nuestro papel en la creación. Dios quiere ver estas señas de honor. Es un espíritu perverso en las mujeres modernas que resienten estas señas de respeto por nuestra parte, pero aunque se enojen, tenemos que darles honor por amor a Dios, y por admiración a su creación.

Una cosa mas, hermanos, viste la razón que Pedro nos avisa tales cosas es para que nuestras oraciones no sean impedidas. Un matrimonio turbulento impide oraciones, sin duda, pero creo que Pedro implica mas que esto. Yo creo que Dios es tan impresionado con su propia creación que le da alegría cuando funciona como la diseñó, y creo que se desagrada cuando los hombres la pisoteamos. Yo creo que nuestras oraciones son impedidas solamente por nuestra actitud mala hacia nuestras mujeres, aún si ellas ni se den cuenta. Yo creo que Dios quiere ver en nosotros copias de sí mismo, imitadores conscientes de su carácter. El vino y nos sirvió, lavando los pies de los apóstoles. ¿Cómo podemos agradarle si no tenemos la misma actitud hacia nuestras mujeres, que son nuestra gloria? Si tu matrimonio anda mal, y piensas culpar a tu mujer por no sujetarse a ti, piénsalo de nuevo. ¿No es tu responsabilidad mayor? ¿Le has faltado el respeto, el honor, la atención, la consideración? ¿No temes que Dios será el defensor de tu mujer? ¿No consideras que Dios te tratará como tú la tratas? Alegra a tu mujer, hermano, para que tus oraciones no sean impedidas.